16 mayo, 2007

Andrés Vásquez...disparatada situación.

Hasta hace una semana ni usted ni yo sabíamos que en el fútbol sueco existía un peruano. Ni usted ni yo sabíamos que ese peruano incluso era una carta importante y goleadora para la selección de Uribe y la próxima Copa América de Venezuela.
Y es que la prensa siempre está a la expectativa de vendernos cualquier disparate. Andrés Vásquez -¿así se llama no?- hasta hace una semana no era nadie, nadie lo conocía, solo su familia y uno que otro amigo por allí; pero metió un gol de "rabona", lindo gol por cierto, bastante vistoso; el mismo que lo ha catapultado a ser el acompañante ideal de nuestros feroces delanteros y pieza vital en el armado de la selección. A veces uno no sabe si reir o llorar con estas cosas, pero esto es un tremendo "sebo de culebra", es tan o más "inflado" que cualquier producto ofertado en ventas por TV.

Andrés Vásquez juega en primera división en Suecia, es cierto, eso es importante para su carrera profesional, para su desarrollo particular, pero eso ¿lo hace merecedor a estar en la selección?
Ni siquiera conoce -o quizás si, por foto- a los que serían sus compañeros en el equipo; claro, esos letales jugadores que se caracterizan por su eficacia ante el arco rival.

Así hemos estado casi 5 días. Viviendo de la expectativa que tan buen gol generó en la gente, gente que quiere creer en algo y que le gusta muchas veces ser parte del embuste de la prensa.
Todo hubiera caido por su propio peso, Vásquez seguro se hubiera integrado a la selección por cuestiones familiares y otras que no vienen al caso. Hasta que el futbolista decidió que ya basta con este rollo...basta!... él prefiere a Suecia
http://www.libero.com.pe/index.php?option=com_content&task=view&id=24832&Itemid=73

Vásquez por lo menos no fue tonto, ya advirtió que a él no le interesa estar en un grupo de perdedores, la misma política que tiene por ejemplo Claudio Pizarro, con la diferencia que él siempre estuvo aquí y es "parte de...", Vásquez por lo menos no se siente parte de nosotros ni tenemos porque obligarlo a querernos; él no está contaminado con los vicios de los peloteros nacionales.

Y así ya varios han publicado con ese lenguaje tan peruano y peculiar que el futbolista "nos arrochó"
Mañana dirán que es traidor a la patria y dentro de poco su familia-en Perú- será hostigada por hordas indignadas ante la negativa del jugador a enfundarse en los sagrados colores de la selección.
Ese es el Perú, el país de los disparates y de los burgas, de los mallquis y los giacarinis...